7 consejos para evitar la entrada de roedores
Muchos de nosotros nos hemos enfrentado a algún tipo de problema de plagas en el hogar, ya sea con insectos o roedores. Es un problema muy común, estadisticamente, 1/3 de la población se enfrenta a estos problemas con ratones y ratas. Veamos dónde, cuándo y por qué comienzan estas infestaciones antes de analizar cómo prevenirlas.
Los roedores se sienten atraídos por una acogedora zona de anidación cerca de un amplio suministro de alimentos.
La mayoría de las plagas de roedores tienen foco en la cocina (o en la despensa si la hay) donde los alimentos son abundantes. También pueden centralizarse en áreas oscuras y poco transitadas como un garaje, sótano o ático. Los meses de otoño e invierno tienden a ser la época del año en que más plagas de ratones y ratas dan la cara. Los roedores vienen en busca de un lugar cálido para dormir y un espacio para acumular su comida, que en muchos casos suele ser robada de tus propios armarios.
Las infestaciones pueden propagarse rápidamente debido a la rápida tasa de reproducción en roedores. Un ratón hembra tiene la capacidad de dar a luz hasta 12 crias cada 3 semanas. Una hembra de ratón puede estar lista para reproducirse a las 4 semanas. Su ciclo de gestación ocurre entre 19 y 21 días.
Consejos para evitar su entrada
Sellado
Asegúrate de sellar cualquier grieta u orificio que se encuentre fuera de la casa. Esto es especialmente importante para las zonas de entrada de cables de suministro como cables eléctricos o telefónicos. Cualquier hueco que más grande que una moneda de 5 céntimos es una puerta potencial para que un roedor entre.
Cimientos
Aquí es donde los roedores pueden llegar más fácilmente a tu casa. Los cimientos y ventanas del sótano necesitan ser revisados para ver si hay cemento suelto, desmoronamientos o burletes pasados. Reemplaza las burletes regularmente. Asegúrate de que todas las ventanas o respiraderos pequeños en el sótano sean seguros y no tengan huecos.
Fontanería y humedad
Asegúrate de limpiar todos los lugares donde se pueda acumular humedad, en zonas donde podrías tener tuberías o desagües con fugas o que estén obstruidos.
Almacenamiento
El lugar y la forma en que se almacenan los alimentos son importantes para reducir el riesgo de una infestación de roedores. Si almacenas cosas como comida para mascotas o alpiste para pájaros fuera de la casa (en una caseta, por ejemplo), es mejor que estén guardados a unos 25 centímetros del suelo. Guarda los alimentos en recipientes herméticos. Los roedores se sienten atraídos por el olor, una vez que un roedor haya olido la comida, se quedará buscando la forma de acceder a ella.
Algunas personas usan su garaje para almacenar alimentos y las mismas reglas se aplican aquí. Asegúrate de no dejar tu garaje abierto por períodos prolongados de tiempo.
Desorden
Todos tenemos una habitación o dos donde permitimos que el desorden tome el control, esto podría ser el caldo de cultivo perfecto para los roedores. Mantener estas zonas lo más ordenadas posible ayudará mucho a prevenir un brote de roedores, ya que notaremos cualquier cosa que no esté en su lugar en caso de aparecer alguna rata o ratón «explorador».
Si aun así logran entrar los roedores a tu casa, o has leído este artículo demasiado tarde, confía en nuestros servicios de desratizacion para eliminar ratas y ratones.